Al escribir estos versos, me impulsó el deseo de colaborar en la educación, ocurriéndoseme dar sencillos consejos al recordar que en más de una ocasión, la gente recita antiguas coplas o refranes que llevan algún fondo moral.
La fórmula, si se pudiera llamar así al espíritu de "Los Consejos de un Viejo", está formada por principios morales, cívicos, cristianos y para sazonar, un poco de ironía.
Por ser preceptos los que forman al ciudadano responsable de sus deberes para con la familia, el prójimo y la Patria, espero que mis lectores memoricen algunos versos que puedan servirles para mejorar sus vidas.
Mi recompensa será la aceptación de parte de la juventud, y de todos en general a quienes son a los que dedico esta obra.
Roberto Pérez Paniagua
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